sábado, 26 de junio de 2010

HAIKU




Casa sin dueño.
Ante la puerta crecen
las capuchinas.







miércoles, 23 de junio de 2010

HAIKU




Tienda de especias.
Me llevo sin pagar
todo el aroma.




martes, 15 de junio de 2010

TANKA - KI NO TSURAYUKI (hacia 866-945)



Es imposible sondear
el corazón del hombre,
pero en mi vieja aldea
las flores nuevas tienen el perfume
de los días de antaño.



(de "Cien Poetas Cien Poemas" - Edit. Hiperión)

sábado, 12 de junio de 2010

HAIBUN


EL JARDÍN

Esta mañana, aunque apenas hace sol, una suave luz inunda el jardín. Es la claridad de las jacarandas en flor. Si miro hacia la ventana, sólo veo manchas de color malva azulado destacando entre el verde de los árboles. Cuando pasan las nubes y el jardín se oscurece, el brillo de las flores se vuelve más intenso. No importa el ruido del tráfico, ni las voces que llegan apagadas de la calle. El silencio del jardín parece intacto.

Mis ojos abandonan la lectura para posarse en esas flores que me invitan desde lejos. No sé con qué placer quedarme, si con los versos de Francisco Brines:

Recuerda una ciudad, de altas paredes,/donde millones de hombres viven juntos,/desconocidos, solitarios; sabe/que una mirada allí es como un beso.

o con ese otro paisaje que hoy se ofrece tras la ventana. Por eso mis ojos vuelan inquietos desde las páginas del libro hasta el jardín. Al final todo se estrelaza y se confunde: los versos, las flores, la quietud del aire. También los gatos parecen sucumbir al encanto del instante y, con gracia felina, se abandonan al sueño.

Avanza la mañana y se convierte en tarde. Cerraré el libro y me apartaré de la ventana, llevándome conmigo unas briznas de secreta felicidad.

Pasan las nubes.
El azul de las flores
se vuelve malva.




miércoles, 9 de junio de 2010

POEMA DE GOTTFRIED BENN


UN CADÁVER CANTA

Un cadáver canta:

Pronto me cruzarán los campos y gusanos.
El labio del terreno roe: el muro se rasga.
La carne se deshace. Y en las oscuras torres
de los miembros la tierra duradera festeja.

Ya libre de mi reja desbordada de lágrimas.
Liberado del hambre y de la espada.
Y como las gaviotas escapan en invierno
hacia las aguas dulces: así: de vuelta a casa.


(de: "Morgue", Zut Ediciones, S.L.)


martes, 1 de junio de 2010

HAIKU




Serenamente,
al compás de las olas,
el corazón.