Ha limpiado la lluvia
lo que
impedía al pino,
el
ciprés,
la morera
y el sauce
darnos su
olor. El agua
ha
refrescado el aire
y ha
dejado el paisaje
transparente.
Sólo
tres, cuatro pájaros
se
atreven a volar.
El cielo
es casi gris,
casi
azul, y se abre
lentamente.
El sol
¿qué sol?
asiste
detrás,
detrás del mundo,
al nuevo
despertar.
Ha
limpiado la lluvia
todo el
polvo
que
dejaron los días,
y los
montes, el valle,
las casas
y los árboles
son
distintos, son otros,
dejando
ver el rostro
del
vacío,
una nada
que brilla,
recién
lavada, pura,
tras
la lluvia.(de: "Desolación y vuelo - Poesía reunida (1951-2011) - Edit. Tusquets)
(fotografía: Susana Benet)
Simplemente precioso. De una profunda sencillez.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo. La poesía de Corredor-Matheos logra transmitir sentimientos profundos con un lenguaje muy sencillo. Lo admiro. Besos,
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