INQUIETUD
Voy de un asunto a
otro
y no encuentro la
paz que necesito.
Mientras leo, me
acosan mil ideas.
Marco un teléfono
pero nadie
responde. Lo abandono.
Regreso a la
terraza, miro al cielo.
Todo se mueve,
todo lo agita el
viento huracanado
que viene del este
y del oeste
en un loco vaivén,
girando sin sentido,
igual que yo.
(fotografía: Susana Benet)
Una de las características del paisaje interior es su capacidad para dejar rastros en lo cotidiano. Ese vaivén del estado de ánimo, esa inquietud que no resuelve la soledad, es un argumento poético lleno de verdad. Un poema que comparto y disfruto. Gracias, Susana.
ResponderEliminarCuando el ánimo está agitado en el pensamiento bullen historias...Es un momento para la creación.Luego el huracán se calma y es cuando se pule la obra.
ResponderEliminarMañana mismo nos sorprenderás con un poema, un haiku o una bella acuarela.
Que pases un buen domingo.
Bello a la vez que inquietante poema.
ResponderEliminarun abrazo.
Cris
Gracias, Fanny y Cris. A veces, el paisaje exterior se vuelve interior, y así brota el poema. Besos,
ResponderEliminarUn poema libre de artimañas lingüísticas y donde la profundidad reside en el mismo poema. Estos poemas ayudan a reconciliarse con la poesía.
ResponderEliminarUn abrazo.