domingo, 21 de marzo de 2010

UN POEMA DE JUAN MARQUÉS


VÉRTIGO INVERTIDO

Desde su silencio, su soledad,
su quietud aparente,
los áboles conocen los caminos.

Vinieron de muy lejos,
hablan lenguas antiguas y remotas
que nadie puede oír.

No dejan de moverse.

Cada vez más adentro,
son las raíces las que están viajando.
(de: Un tiempo libre - Edit. Comares)

5 comentarios:

  1. Muy bueno este poema, de una gran profundidad.
    Los 2 últimos versos lo dicen todo.
    Un saludo.

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  2. Composición muy profunda como dice, mi precedente, José antonio.
    Pero la acuarela, yo a lo mío, que parece un almendro me recuerda, del bachiller, un tipo de verso que decía:
    Como el almendro florido
    has de ser con los rencores,
    si un rudo golpe recibe,
    suelta una lluvia de flores.

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  3. Qué bonitos versos los del almendro... Gracias, Iván.

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  4. Todo ello (el blog entero), es para mí una delicia espiritual y visual, todo, hasta los comentarios, por supuesto. Gracias.
    Un abrazo.

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  5. Hola. Estoy en armonía con jotabede: este blog es una delicia espiritual y el poema que has colgado me parece precioso y de una gran profundidad. NO conocía a este poeta , pero lo investigaré.
    Un beset

    Cris

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