domingo, 23 de junio de 2013

POEMA







EL GATO 

No puede ser que el gato,
en su reposo inmóvil,
los ojos bien abiertos
y las pupilas quietas,
no se adentre en espacios
que los hombres ignoran,
no se encuentre sumido
en profunda, en perfecta
meditación.
 
 
 
(Fotografía: Susana Benet)
 
 

4 comentarios:

  1. ¡Precioso! Tanto el poema, la foto y gato.
    Saludos...

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  2. Me alegra que te haya gustado, Eva. Es así como lo sentí. Besos.

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  3. Una ilustración perfecta y adecuada de la fotografía, con sus toques orientalistas y su ajuste de palabras, seleccionadas con primor. Un abrazo a la poeta...

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